A contrarreloj: Primera temporada - J. G. Chamorro & Fénix Hebrón

Este es uno de los motivos por los que A contrarreloj: Primera temporada me llamó mucho la atención. El otro es que en los relatos policíacos, los detectives suelen asociarse con crímenes, delitos, asesinos y sus tramas mezclan no solo intriga, suspenso y espionaje, si no también mucha violencia, uso de armas e incluso sexo.

Hasta ahora no había conocido relatos de este género narrativo construidos en torno a un memorable personajes de ficción que trabajase de detective especializado en rastrear y recuperar relojes lujosos. Ni imaginé que pudiera existir una literatura detectivesca distinta, alejada del género sombrío, fresca, amena, entretenida y apta para todo público.

Este primer libro de la saga A contrarreloj se compone de 7 relatos:

Los relojes son el centro de todas las historias, las primeras dos fueron escritas en el 2011 por Fénix Hebrón, las restantes son de J. G. Chamorro y datan del año 2018. 

En cuanto a los relatos cortos, solo el último pertenece a Fénix Hebrón, escrito como muestra de aprecio hacia el propio J. G. Chamorro.

Cada relato es independiente y está compuesto por capítulos cortos, amenos y fáciles de leer, que hacen la lectura fresca, llevadera y adictiva.

Además las historias están bien ambientadas en el espacio y en el tiempo y nos transmiten la idea de estar en el mismo lugar de la acción, así que, gracias a las investigaciones internacionales pude viajar sin salir de casa a la ciudad de Miami, puro lujo, glamour y diversión y a República Dominicana, un país que se destaca por la calidez de su clima y la hospitalidad de su gente. No sin antes darme el lujo de callejear por Vicenza y de cenar una sabrosa pizza a los pies de la Basílica Palladiana.

 

Los relatos están contados en primera persona por su protagonista, el detective privado Paul Davis, personaje creado originalmente por Fénix Hebrón pero desarrollado por J. G. Chamorro, quien retomó el proyecto abandonado y forjó la personalidad del detective, dotándolo de ese toque especial que necesitaba para destacar, llamar la atención del lector por su originalidad y convertirse en memorable.

Paul Davis es un detective nada convencional, solo resuelve casos que guardan relación con los relojes, su fascinación por estas prendas lo ha llevado a trabajar para la firma de seguros "Franz LZ Insurances" y por tanto a especializarse en encontrar y recuperar estas joyas únicas y tan valiosas.

Con gran estilo, Chamorro ha creado un detective singular y carismático que cautiva al lector, buen observador, siempre presta especial atención en aquello que nadie nota, con poder de deducción, intuitivo, sagaz y paciente.

Motero por convicción, a diario se desplaza en su Yamaha Scooter, la solución perfecta a los atascos de la ciudad; odia montarse en los aviones y no por miedo, y siente aversión por las armas de fuego. Además de hacer hábil uso de todos los adelantos tecnológicos para resolver sus casos, siempre va armado con su navaja Victorinox SwissChamp, su fiel compañera junto a una pequeña linterna Maglite y una lupa de relojero Eschenbach.

Sin duda un personaje bien construido, original, dotado de mucha humanidad, familiar y entrañable.

Los personajes secundarios que van apareciendo en los distintos relatos también tienen características propias y están bien trazados, provocan empatía y en ningún momento hacen que decaiga el interés y el ritmo narrativo de las historias.

Con estilos distintos, pero directos y sencillos, los autores han sabido mantener la dosis 

adecuada de intriga a través de tramas fluidas, variadas y bastante originales. 

Develando poco a poco los misteriosos robos de relojes, quieras o no, te ves implicado en las situaciones más dispares tratando de resolver cada caso a lado de Paul Davis cual cómplice de todas sus investigaciones.

Realmente el libro me ha sorprendido gratamente y he disfrutado bastante con las investigaciones de este singular detective. 

La narración es ágil y atrapa, y los relatos, en su gran mayoría, me han enganchado. 

Ocasionalmente abundan las explicaciones dentro de la narración, en mi opinión, siendo menos prolijo en las aclaraciones, se le otorga más emoción al lector, permitiéndole dejar volar su imaginación.

De Fénix Hebrón me gustó mucho "El reloj de la condesa", una historia que mezcla aventura, acción y suspenso con una pincelada de romanticismo. Además, siendo fanática de la manzana mordida, ja, ja, ja, no pude quedarme indiferente frente a "Un Apple Watch no hace tic tac" de J. G. Chamorro, un relato que fusiona el pasado con el presente, dando como resultado una historia de perfecta armonía entre lo clásico y lo moderno.

Sin duda cuando se escribe un libro lo más importante es el contenido y el desarrollo de la obra. Sin embargo, hay un aspecto que para mí tiene casi la misma importancia que la obra en sí, se trata de la cubierta del libro.

A pesar de que el refranero popular afirma que no se debe juzgar un libro por su cubierta, yo me dejo llevar bastante por ella y es el primer contacto que establezco con la obra.

4/5   

☕☕☕☕